6 consejos para ser una persona positiva

Me parece increíble que vivimos en un mundo en el que, cuando te ven bailando un lunes por la mañana, la gente te pregunta qué sucedió o por qué estás tan feliz. ¿Por qué es tan extraño celebrar el simple hecho de estar viva? A mi lo raro me parece no darse cuenta de que cada momento es una bendición. Sin embargo, también entiendo que todos tenemos días malos y a veces es difícil ver los bueno de las cosas. Por eso te quería compartir 6 consejos que me han ayudado a ser una persona más positiva y feliz.

La perspectiva que tienes de la vida influye de manera radical en tu realidad, tus emociones, tus acciones y la probabilidad de que logres tu objetivos. No solo eso, pero la gente optimista tiene menos probabilidad de sufrir una enfermedad cardiovascular, tiene mayor fuerza inmunológica y vive más años. Además, ¿quién no quiere ser feliz?

Por eso, ya sea que el ser positiva te venga de manera natural o, que debas trabajar en ello, es importante desarrollar hábitos para mantener una perspectiva positiva de la vida. Estas son algunas de las cosas que han tenido mayor impacto en mi vida. 

1. Rodéate de amigos con buena energía

Jim Rohn dijo que eres el promedio de las 5 personas con las que pasas más tiempo y para bien o para mal, tus amigos pueden cambiar tu vida. Asegúrate de rodearte de personas que admires, personas que vean el vaso medio lleno y que tengan sueños en grande como tú. De esa manera, pueden ayudarse mutuamente a superar situaciones difíciles y es un incentivo para dar lo mejor de ti. Eso no quiere decir que no puedes pasar tiempo con otras personas, sin embargo, decide bien a quién pones más cerca.

Hazte las siguientes preguntas:

1. ¿Te sientes mejor o peor después de hablar con esa persona?
2. ¿Te llena de energía o sientes que te agota?
3. ¿Te inspira a lograr tus objetivos? 

Reto: Organiza una videollamada con amigos que te inspiren este fin de semana. Pueden charlar, ver una película o incluso jugar a algo, yo te recomiendo Skribbl, un juego online en el que todos deben adivinar qué estás dibujando ( yo tampoco creí que sonaba divertido hasta que lo jugué con mi equipo de trabajo y terminamos pasándonos dos horas ahí). 

2. Detente y reflexiona

Todos tenemos días malos, pero es importante detenerse a pensar en las cosas de manera más objetiva. Piensa en cuántos problemas del pasado ahora son completamente irrelevantes y analiza si en realidad tu situación es tan terrible. Lo más probable es que puedas repararlo o que puedas encontrar alguna alternativa. Si desarrollas el hábito de siempre buscarle el lado positivo a las cosas, será imposible no volverte más optimista. 

Hazte las siguientes preguntas: 

• ¿Cómo puedo transformar esto en una oportunidad?
• No tengo lo que quiero, ¿pero qué otra cosa he logrado obtener a través de esto?
• ¿Qué puedo aprender de esta situación?
• ¿En realidad es tan malo como pienso? 
• ¿Cómo puedo mejorar/ resolver esta situación?

Reto: La siguiente vez que te sientas abrumada por algún problema, detente, respira y responde una de las preguntas anteriores. Verás como va a cambiar tu perspectiva. 

3. Práctica gratitud

La gratitud es el antídoto de todo mal. Básicamente, se trata de tomarte el tiempo de recordar todas las cosas buenas que tienes en tu vida (e incluso las malas) y apreciarlas profundamente. Según Tony Robbins, “You can’t be angry and grateful simultaneously. You can’t be fearful and grateful simultaneously”. Es decir, la gratitud es el antídoto al miedo y al enojo. Al sentirte agradecida por lo que tienes, todo “lo malo” pierde importancia, ya que tu mente se pone en modo de abundancia. Cada vez que algo me preocupa, empiezo a pensar en todo lo que tengo, una familia que amo, amigos que adoro y un trabajo que me inspira… de pronto nada parece tan malo. 

Para empezar, puedes usar estas prompts:

• Piensa en la última vez que reíste hasta llorar y escribe sobre ello.
• Haz una lista de 3 cosas que te hicieron sonreír esta semana.
• Piensa en alguien que ayudó a que te conviertas en la personas que eres ahora y escribe lo que significan para ti.
• Escribe sobre algo que estás esperando con ansias. 

Reto: Consigue un diario o cuaderno y durante los siguientes 7 días, escribe 5 cosas por las que estás agradecida cada mañana. Pueden ser cosas grandes o pequeñitas, pero verás como te ayuda a restarle importancia a los problemas triviales de la vida. 

4. Haz un detox de noticias

Hace aproximadamente un año, tomé la decisión de no ver ninguno tipo de noticiero de manera regular. La realidad es que las malas noticias venden más que las buenas y para los noticieros, es más rentable decirte todo lo malo. Esto puede darte una idea errónea de la realidad y empiezas a creer que la delincuencia, violencia y maldad dominan nuestro mundo, algo que obviamente te hará pesimista. Esto no quiere decir que no te informes de ninguna manera, yo consumo muchísimo contenido en forma de blogs y podcasts, donde me entero de lo que sucede en un contexto más alineado con mis valores y prioridades.

Reto: Trata de no ver ni leer ningún noticiero durante la siguiente semana. Esto te dará un respiro de todas las cifras de contagiados y noticias sobre hospitales llenos y la economía en recesión. Usa ese tiempo en un hobby o en un proyecto personal que tengas. 

5. Haz ejercicio 

Ya había mencionado antes que hacer ejercicio hace que el cerebro segregue endorfinas que nos llevan a un estado de mayor felicidad. Además, ayuda con tu autoestimas y estimula tu creatividad y concentración. Es fácil ser más optimista cuando se te están ocurriendo buenas ideas y tienes la energía y disciplina para trabajar en lo que necesites. 

Reto: Crea una rutina en la que puedas dedicar al menos 4 horas a la semana a mover tu cuerpo. Te recomiendo que sea la primera cosa que haces al despertarte por que así tendrás más energía el resto del día. Puedes leer más sobre mi morning routine aquí.

6. Cuida lo que dices

Las cosas que decimos tienen una gran influencia en lo que pensamos. Hay una frase que me encanta de Kelly Lee Philips “If you argue for your limitations you get to keep them. But if you argue for your possibilities you get to create them!” Básicamente, significa que si continuas mencionando tus limitaciones y te enfocas en lo que ‘no’ puedes hacer, esa será tu realidad. Por eso, en vez de usar frases como “yo quiero”, “yo necesito”, “yo desearía” – las cuales transmiten un pensamiento de escasez- usa palabras como “yo tengo”, “yo puedo”, “yo elijo”, “yo amo”, “yo estoy agradecida por”.

Reto: Durante la siguiente semana, toma nota de cada vez que utilizas una frase limitante y esfuérzate por encontrar una alternativa para expresarte de manera más positiva. Simplemente el hecho de decir lo que vas a lograr en voz alta, te motivará más a conseguirlo. 

Recuerda que no se trata de vivir en una nube y fingir que no existen los problemas. Al contrario, se trata de aceptar que los problemas, errores y caídas son parte de la vida, pero que tú tienes control absoluto sobre cómo reaccionas a ellos. Ser una persona optimista y positiva es una decisión que muchas veces va a requerir ir en contra de las costumbres e instintos que hemos desarrollado durante toda una vida, pero te aseguro que vale la pena. Cumple los retos en este blog y verás como tu ánimo cambia para bien y la vida se llena de oportunidades y posibilidades. 

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