Tu corazón empieza a palpitar más rápido, sientes un nudo en el estómago, dolor de cabeza, tienes cero motivación de continuar… estos son algunos de los síntomas que puede causar el estrés en tu vida. Mucha gente cree que el estrés es algo normal, y a veces incluso se lo relaciona con la productividad, pero ninguna de estas creencias es verdadera. En realidad, sentir estrés a diario NO es normal y te impide ser la mejor versión de ti misma; tiene un impacto negativo en tu creatividad, eficiencia y motivación. En este blog te voy a dar algunas estrategias prácticas para reducir el estrés a corto y largo plazo. La mayor parte de los tips que te comparto los saqué de un workshop al que fui recientemente con Stephanie Harrison, la CEO de The New Happy.
Reducir el estrés en el momento
Empecemos con unos tips para que puedas combatir el estrés precisamente en el momento en que lo sientes. Por ejemplo, después de recibir un email negativo, después de tener una discusión con alguien o incluso antes de dar un examen.
1. Respira hondo
Este paso es un poco obvio, pero no tienes idea de lo poderosa que es nuestra respiración. Cuando sientas estrés, pon un timer de 3 minutos y empieza a respirar hondo. A mi me gusta inhalar por 4 segundos y exhalar por 5 segundos. Enfócate en tu respiración y despréndete de cualquier otro pensamiento que venga a tu mente.
2. Dale un nombre al sentimiento y a la causa.
Otra técnica para reducir el estrés es reconocerlo y nombrar el sentimiento específico que estás experimentando, al igual que su causa. Por ejemplo, pausa y di, “Me siento ansiosa porque no sé si me van a aceptar a la universidad que apliqué”. Simplemente decirlo en voz alta y tener claridad sobre cómo te sientes va a ser liberador y reducir la intensidad del sentimiento. Si quieres, también puedes nombrar los síntomas físicos, ej. Dolor de cabeza, dolor de barriga, etc.
3. Dile a alguien cómo te sientes
Todas sabemos que es muy útil desahogarnos con alguien, sin embargo, hay que hacerlo de la manera correcta. No se trata de decirle a todos tus amigos la historia de lo que pasó y hacer el problema más grande, intenta enfocarte en cómo te sientes y pídele a una amiga que te anime. Esto también funciona para fortalecer tus relaciones con otros, ya que pueden apoyarse mutuamente.
4. Crea un ritual de positividad
¿Sabías que las emociones que sentimos no duran más de 90 segundos? La única razón por la que a veces sentimos que algo negativo se alarga horas, e incluso días, es porque la emoción original desencadena una serie de reacciones que se renuevan y no nos permiten desconectar del problema.
¿La solución?
Crea un ritual para romper el ciclo de negatividad. Puedes bailar, cantar, lees un par de páginas de un libro o hacer cualquier cosa que te llene de buena energía. Hacer esto también va a contribuir a tu optimismo y felicidad.
Reducir el estrés a largo plazo:
Estas son algunas ideas para reducir el estrés a largo plazo.
- Escribe una lista de todas las cosas/eventos/personas que te causan estrés, y dales un número del 1-10 dependiendo de su intensidad.
- Para todas las cosas a las que les asignaste un valor igual o superior a 7, responde las siguientes preguntas:
- ¿Hay alguna otra manera ?
- ¿De quién puedo aprender para manejar este estrés de una mejor manera?
- ¿Qué historia me estoy diciendo a mi mismo que causa este estrés?
- ¿Quién me puede apoyar en esto?
Te vas a dar cuenta de que muchas de las cosas que causan estrés pueden reducirse o eliminarse si quitamos el piloto automático y empezamos a hacer algo al respecto.
Encontrarle significado al estrés:
Está comprobado que si encuentras significado a tu estrés o dolor, serán menos dañinos e incluso pueden contribuir a un propósito más grande. Hazte las siguientes preguntas para re-interpretar tus sentimientos negativos:
- ¿Cómo puedo ver a la situación que me causa estrés de una manera diferente?
- ¿Qué me beneficia de esta dificultad?
- ¿Qué estoy aprendiendo en este momento?
- ¿Cómo puedo tomar un poco de control sobre esto?
- ¿Qué opciones tengo?
Conclusión
Buscar lo negativo es parte de nuestra naturaleza, ya que en el pasado, identificar amenazas a nuestro alrededor, era lo único que nos mantenía con vida. Sin embargo, puedes controlar ese instinto con las prácticas que te compartí en este blog y así reducir o evitar el estrés.
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